sábado, 3 de septiembre de 2011

Oclocracia...

Y la corrupción, apá Nati?...

Federales a Narco León

El 'relamido' tricolor

LA CORNADA

Por Renecio del Rincón t.

“Se necesita un siglo para formar un Estado y una sola hora

para convertirlo en polvo" (qué digo: ¡3 minutos!)....

-Lord Byron.

Tiempo de canallas

Ante el increíble y hediondo cochinero político en sus tres niveles -federal, estatal y municipal- que la espantable matanza del Casino Royale regiomontano hiciera aflorar más allá de toda duda razonable, mi más cercana y cara familia me ha pedido que, en legítima defensa propia, y recordando al Chapulín Colorado: ¡Oh!, y ahora ¿quién podrá defenderme?..., me abstenga de escribir sobre lo que 71 años de corrupción y 11 de ineptitud, que suman 82 de suprema ineficiencia gubernamental, han hecho de un país al que difícilmente reconozco ya. Les hago caso y, ahora no por flojera sino por cobarde, tan sólo les participaré las opiniones de periodistas más valientes en forma de viñetas. Perdonará Usté la graciosa huida…:

-Salvador Camarena, reportero de El País español en México, 21/08/11: “A México se le están acabando los "nunca antes...". Nunca antes había estallado en el país un coche bomba hasta que Ciudad Juárez vivió la explosión de uno; nunca antes se había lanzado una granada contra población indefensa hasta que las esquirlas enlutaron a Morelia; nunca habían matado a un candidato a gobernador que estaba a punto de ganar hasta que hace un año ocurrió en Tamaulipas (rápidamente suplido por su hermano); nunca habían asesinado a tantos alcaldes hasta que eso se volvió cosa de cada mes (ayer mataron a golpes a uno más), y nunca antes hasta hoy un partido de futbol de la primera liga se había suspendido porque el sonido de disparos hizo que jugadores y aficionados buscaran refugio… Nunca los narcotraficantes habían secuestrado cuatro periodistas. Hasta que en Gómez Palacio ocurrió hace poco más de un año. Nunca habíamos visto que de una cárcel salieran reclusos a cometer asesinatos y regresaran a ponerse a salvo tras las rejas, hasta que supimos que del reclusorio de Gómez Palacio salían criminales a matar a las calles de Torreón. Nunca se había transmitido un tiroteo en vivo y a todo el territorio nacional, hasta que desde el estadio Corona en Torreón, todos vimos y escuchamos cómo los tiros de los criminales ganaban la partida. El juego quedó para mejor ocasión”. Estas dos notas fueron publicadas antes del asalto al Casino en Monterrey. ¿Qué no dirá ahora de México El País?...

-Sergio Sarmiento, Reforma 23/08/11: “Lo que buscan los criminales es aterrorizar a la población. Por eso matan con la espectacularidad con la que lo hacen y por eso disparan a un estadio de futbol en el que se lleva a cabo un juego de primera división. Lo peor de todo es que lo están logrando. El terror generado por los disparos en el estadio del Santos de Torreón lo demuestra más que nunca”.

-Pedro Ferriz de Con, sobre el ‘gobernador’ priísta Rodrigo Medina de la Cruz, 29/08/11: “Nada de lo que haga este “pobre relamido” ya podrá jamás ser bien visto. Lo ven como heredero del pasado. Lo ubican como instrumento de lo que fue el principio del caos, con la administración de Natividad González Parás, otro temeroso que abrió las puertas de Monterrey a una delincuencia voraz, que rápidamente la hizo su presa… ¿Culpas? Aceptar que un negocio establecido pague aparte de impuestos, hasta triples tributos a los cárteles. Tener policías corrompidas hasta la médula. Jueces torcidos hasta el tuétano. Dependencias de los tres niveles de gobierno, empecinadas en frenar la economía. Un Congreso indolente. Partidos políticos establecidos en universidades del delito. Ciudadanos conformes con lo que sea... ¡Ah! y también los gringos, nuestro villano favorito”.

-Ricardo Alemán, 29/08/11:Y resulta ridículo que, a pesar de las evidencias de que jueces y magistrados corruptos están detrás de los amparos que mantenían funcionando los casinos, ninguna autoridad del Poder Judicial federal haya sido capaz de decir “esta boca es mía… ¿Pero, dónde están las autoridades municipales y estatales de Monterrey y Nuevo León? Simple y sencillamente no están, no existen: dejaron crecer el cochinero y, una vez que han sido rebasadas, gritan por la ayuda federal… ¿Cuántos gobernadores, alcaldes, legisladores, policías, empresarios y hasta medios han contribuido a la simulación que tiene a Nuevo León en la peor crisis de su historia?”

-Jaime García Elías, 29/08/11: La delincuencia está en manos de especialistas; la prueba estuvo en la precisión cronométrica -como de película policíaca, literalmente- con que se realizó el ataque al Casino Royale, de Monterrey. La persecución de la misma, como ha quedado demostrado tantas veces y como se infiere de que la reacción oficial más enérgica (?) por parte de la autoridad, en el caso, consistió en ofrecer “una cuantiosa recompensa” a quien delate a los asesinos -la apuesta por el “chivatazo”, pues; no por la investigación científica-, está, en cambio, en manos de improvisados e incompetentes. De improvisados e incompetentes, en efecto… Pero, además, cínicos. ¿O merece un calificativo más amable quien no ha tenido siquiera el mínimo de pudor necesario para recoger el guante que Alejandro Martí arrojó al rostro de las autoridades (“¡Si no pueden, renuncien…!”), a pesar de tan escandalosas, reiteradas y dolorosas muestras de incapacidad y de impericia?”…

-Sergio Sarmiento, 31/08/11: “No debe sorprender que los dueños del Casino Royale hayan huido del país. Resultaba claro que se les quería hacer responsables de un ataque en que ellos fueron víctimas y no perpetradores. Infortunadamente, la búsqueda de chivos expiatorios es una constante cuando hay una tragedia en nuestro país. Los grupos de presión -transportistas, sindicalistas, antorchistas, panchosvillistas y activistas de todo tipo- se pueden dar el lujo de cerrar vialidades y establecer plantones permanentes sin que los gobiernos se atrevan a hacer nada. La autoridad a lo más que llegan es a suplicarles que se quiten, como está haciendo hoy el gobierno capitalino con los miembros del Sindicato Mexicano de Electricistas, que han tomado posesión del Zócalo y no quieren permitir las fiestas patrias”.

Y, para endulzarnos la amarga píldora: Hoy no estamos de humor para el humor.

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