LA CORNADA
Por Renecio del Rincón t.
“El poder, el mejor afrodisíaco”... –Henry Kissinger.
Azor que cae...
Aclaran los señores Porrúa: “Azor: Ave de rapiña falconiforme, aquílida, de vuelo potente, empleada en cetrería.” Agrego yo: No es otra cosa que nuestro gavilán o halconcillo común pero, con ese nombre en particular, muy empleada en España por el pueblo en la caza de pluma (torcazas, palomas y perdices); visto que los ‘señoritos’ prefieren la escopeta para dispensar carne a su alacena.1
Por Renecio del Rincón t.
“El poder, el mejor afrodisíaco”... –Henry Kissinger.
Azor que cae...
Aclaran los señores Porrúa: “Azor: Ave de rapiña falconiforme, aquílida, de vuelo potente, empleada en cetrería.” Agrego yo: No es otra cosa que nuestro gavilán o halconcillo común pero, con ese nombre en particular, muy empleada en España por el pueblo en la caza de pluma (torcazas, palomas y perdices); visto que los ‘señoritos’ prefieren la escopeta para dispensar carne a su alacena.1
¿A qué viene tan rebuscado preámbulo del Renecio? Pues a la sensacional noticia que ocupa diarios y pantallas a toda hora con el suceso del momento: Cual peninsular Cuauhtémoc, cae Juan Camilo Mouriño, discutido Secretario de Gobernación con doble pasaporte, en discutible ‘accidente’ de aviación’ y precisamente en medio de álgida coyuntura política para el país, sumido en torbellino económico, político, de lucha con el ‘narco’ y ‘maestros’ amotinados y, ahora, con más profundos misterios sobre asesinatos políticos de imposible esclarecimiento aún para el mítico Sherlock Holmes. No olvidemos que en el pasado político mexicano, el avionazo y el carreterazo han sido las armas de elección para deshacerse de personajes ‘molestos’ cuya lista es larga: Ramos Millán, Carlos Madrazo, algún empresario tapatío, ‘Maquío’, González Gallo, etc. Arteras armas preferidas por la clase política aún sobre la más clásica y varonil del pistoletazo, como en Lomas Taurinas en perjuicio de algún sonorense candidato deslenguado e incómodo...
Claro que no podía faltar la nota discordante y ridícula cuando apenas el jueves, el grupo parlamentario que en el Senado encabeza el esclarecido Beltrones, se inconformó con el homenaje rendido por el gobierno panista a su caído azor, ¡por considerarlo excesivo!... Tenían que ser los descendientes y herederos de los inventores del exceso laudatorio al poderoso en turno; de los besamanos presidenciales y de la chupada doble a los calcetines del jefazo, quienes haciendo alarde de cortedad de memoria critican procedimientos que ellos mismos instauraron. ¡Vaya cinismo de esa partida de atorrantes lameculos frustrados! Como México no hay dos... en el mundo entero...
1.- Recomiendo a los amantes de la cacería la lectura del maestro vallisoletano Miguel Delibes en su deliciosa obra “Los santos inocentes”, donde además del azor se emplean buhos y otros decoys para conseguir caza con baratura.
La Casa ¿Blanca?...
Y la predicción se cumplió: Triunfa arrolladoramente (por landslide le llaman allá) el mulato Barack Hussein Obama. Elegante, obligada y caballerosamente -no como otro obcecado tropical-, su contrincante McCain de inmediato acepta y concede... La enorme diferencia no lo es tanto entre el número de delegados ganados en la sabia y curiosa aritmética electoral gringa, sino en el contenido del espacio interior existente entre oreja y oreja del candidato derrotado... Y casi todo el mundo contento: Que el simpático ‘negrito’ representa el necesario cambio; que es la antítesis política y mental del balbuceante y odiado W Bush; que físicamente es más semejante a nosotros que McCain o Bush y, en consecuencia más de fiar (¿?); que, ahora sí, el ogro “gran capital” gringo encontró al fin la horma de su zapato; que etc., etc., etc... Y los medios, sobre todo los zurdos que son mayoría, tendrán materia prima para meses y meses de incesante incienso y buenos propósitos. Tanto y bueno, pero...
La Casa ¿Blanca?...
Y la predicción se cumplió: Triunfa arrolladoramente (por landslide le llaman allá) el mulato Barack Hussein Obama. Elegante, obligada y caballerosamente -no como otro obcecado tropical-, su contrincante McCain de inmediato acepta y concede... La enorme diferencia no lo es tanto entre el número de delegados ganados en la sabia y curiosa aritmética electoral gringa, sino en el contenido del espacio interior existente entre oreja y oreja del candidato derrotado... Y casi todo el mundo contento: Que el simpático ‘negrito’ representa el necesario cambio; que es la antítesis política y mental del balbuceante y odiado W Bush; que físicamente es más semejante a nosotros que McCain o Bush y, en consecuencia más de fiar (¿?); que, ahora sí, el ogro “gran capital” gringo encontró al fin la horma de su zapato; que etc., etc., etc... Y los medios, sobre todo los zurdos que son mayoría, tendrán materia prima para meses y meses de incesante incienso y buenos propósitos. Tanto y bueno, pero...
Una vez que tome posesión, se las va a ver negras -no es puya, que conste-, porque África sueña que la libre de su horrible pobreza; México, desde ya, le exigirá la demolición del muro fronterizo, de la ‘Cortina de Nopal’; Cuba asume que suavizará el embargo comercial o de plano lo levantará; Rusia (con su habitual desfachatez) demanda el desmantelamiento de los misiles caza-misiles -defensivos- instalados en Polonia y República Checa, y para subrayar el sagrado derecho que la madre Rusia tiene para atacar Europa, instala más misiles -ofensivos- en Kaliningrado, baluarte estratégico (entre Polonia y Lituania) que jamás devolvió a sus legítimos dueños, quienquiera que estos sean. ¿Quién les habrá otorgado a los sucios capitalistas el derecho de defensa? ¡‘Háigase’ visto, pelaos estos!...
Felicidades a gringolandia por su flamante cruzado del cambio. Ahora tan sólo les falta que, como pasa en México con el ultra exigido cambio del PAN, lo ‘dejen’ gobernar... No ignoremos que en los EU, como aquí, existen fuertes grupos de exaltados muy refractarios a ese tipo de cambio en especial: Ku-Klux-Klan, Neo-nazis y skinheads y, desde luego, la US Steel Corp. y acaudalados compinches. Lo dijo con alta sapiencia Juan García de Quevedo en su columna de hoy: “África seguirá en su pobreza y nosotros con nuestras grandes y graves contradicciones. Obama cambiará un poco a los EU y un poco menos al mundo”... Es cuanto, queridos lectores (3).
Y, para endulzarnos la amarga píldora leeremos la carta de un negro. Amigo blanco: Un par de cosas deberías saber. Cuando yo nací, yo era negro. Cuando empecé a crecer era negro. Cuando voy a la playa soy negro. Cuando tengo frío sigo siendo negro. Cuando tengo pánico sigo siendo negro. Cuando me enfermo soy negro. Inclusive cuando me muero sigo siendo negro. En cambio tú, mi querido amigo blanco: Cuando naces eres rosado. Cuando empiezas a crecer te pones blanco. Cuando vas a la playa te pones rojo. Cuando tienes frío te pones azul. Cuando sientes pánico te pones amarillo. Cuando te enfureces te pones morado. Cuando estás enfermo, verde. Y cuando mueres te pones gris. Y todavía tienes la poca madre de decirme que yo soy de ‘color’... ¡No manches! Firma: Un negro encaboronado.
Nos leeremos en la siguiente Cornada. Y manda tus pertinentes comentarios (impertinentes ¡absteneos!), simplemente haz click en la verde palabra ‘comentarios’ aquí abajito y sigue sin temor las instrucciones para publicarlos, anónimos o con tu URL. ¡Ciao!
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