viernes, 24 de octubre de 2008

Lapsus rojos

LA CORNADA
Por Renecio del Rincón t.

“Su interés no es la defensa de la industria petrolera ni ningún tema de interés
nacional. (Tan sólo) está dispuesto a llevarse entre las patas al País”...
-El paisano y diputado Héctor Larios, en referencia a los recientes actos del pg.

Obrador El Pequeño (legítimamente)
Y cada día que pasa su imagen -que jamás ha tocado la grandeza- se achaparra aún más (hasta hace apenas unas semanas en estas líneas era PG, y ya va en pg...), gracias a su “actitud irrazonable, por no decir que demencial”, como acotara Catón el día siguiente a sus habituales, consabidos, y bien anunciados desfiguros y sainetes de ‘tomas’ y ‘cercos’ en el Senado; no obstante los cuales se aprobó ya la desvaída reforma energética. Y el próximo martes llevará su circo a San Lázaro, con sus infaltables e indomables fieras: Rosario Ibarra, Yeidckol Polevnsky (o como se llame), Monreal, Dante Delgado y Alberto Anaya. ¡No se pierda la función, entrada 2 X 1, niños gratis!... Entresacamos de Catón el 24/10/08: “Alguna buena cualidad ha de tener López Obrador, pero la oculta cuidadosamente. Su talante -y ahora también su aspecto- es el de alguien instalado en la locura... Da la impresión de que en el fondo habría preferido que el petróleo se privatizara, a fin de tener motivo para sus alborotos... El propio PRD la condena, y algunos de sus miembros llaman ‘esquizofrénico’ a López Obrador” Y hasta el laureado vocero Granados Chapa al respecto admite: “Incurrió en un error... En cambio, se distanció de los legisladores de los partidos que lo postularon a la presidencia y del grupo de expertos e intelectuales que presentaron la propuesta ciudadana...”. Aparte de la tremenda duda sobre la capital de Dakota del Sur, yo también pregunto: ¿Quién financia a ‘adelitas y adelitos’ o ‘Panchos Villa’ y demás ralea? Porque ‘esos’ (Díaz Ordaz dixit) no andan ahí de gratis...

Sic gloria transit
Los Césares y generales victoriosos hacían su triunfal entrada en la antigua Roma a bordo de engalanada cuadriga, con un esclavo sosteniendo sobre su cabeza una áurea corona de roble y laurel, y musitándole al oído por todo el trayecto: “Recuerda que eres un simple mortal”. Aires del republicano origen romano, y como quien dice, ‘pá que no se te suba la fama a la cabeza’...
Y ya que del “Premio Belisario Domínguez” que le otorgara el Senado hablamos, cuánta falta le anda haciendo ese esclavo al ‘ínclito’ Granados Chapa, cuando en su columna en Reforma del 22/10/08 se sumerge en el temblador pantano de la controversia entre la rampante izquierda mundial y la tambaleante PGR, sobre el sonado caso del asesinato del ‘periodista’ extranjero Brad Will en calles aledañas de Oaxaca: Peritos en balística de la PGR sostienen que Will fue ultimado -con fines propagandísticos- por dos miembros de la APPO, plenamente identificados y ya con formal prisión, a corta distancia y mediante 2 impactos, uno de ellos por la espalda. Mientras que Granados propala el ‘dictamen pericial’ del 5º. Visitador de la CNDH, quien (citamos intacta de dicha columna): “Sostiene que el arma homicida fue disparada (presuntamente por policías asesinos) a una distancia de entre 35 y 50 metros. Impulsada desde un revólver 38 especial una bala adquiere (según información de los fabricantes) una velocidad de 165 milésimas de segundo, tiempo que coincide con los análisis al audio de la cámara del periodista, que captó el sonido del disparo (pregunto yo: ¿enmedio de una balacera?) y registró la caída de su cuerpo herido; entre esos dos momentos hay 166 milésimas de segundo”. Hasta ahí el sesudo dictamen zurdo, perdón, de Derechos Humanos. Vuelvo a preguntar yo: ¿Y el segundo impacto? Seguramente lo dispararon los pajaritos del cielo -rojo- rato después cuando Will yacía ya boca abajo... Por otra parte, creo recordar de mis ya muy lejanas clases de Física Elemental que la velocidad de cualquier objeto se expresa mediante una relación entre el espacio recorrido y el tiempo empleado; esto es, kilómetros o millas por hora para vehículos; metros o pies por segundo en el caso de balas. Pero de ninguna manera como lo expresa el visitador que alude a fracciones de segundo que nada nos dice sobre su kinética (de ahí el mote de cinegético al deporte del tiro). Para mí, el tal dictámen pericial no es otra cosa que un galimatías tendencioso, engañabobos y dogmático. Muy en el estilo y la línea de la propaganda global socialista. Me sorprende que el prestigiado y laureado periodista de todos mis respetos, no lo haya entendido al leerlo (no es lo mismo leer que entender), antes de publicarlo bajo su égida. Una de dos: O don Miguel Ángel andaba de pinta de su clase de Física Elemental, o su maestro o maestra era egresado/a de la Benemérita Normal de Poncitlán, cuyo inmortal e histórico lema ha sido y es: “Por una sociedad sin clases”... de Física. Me inclino por lo segundo. Dicen los hombres de ‘cencia y artegia’ que, debido a la relativa baja velocidad del sonido, el tocado por una bala jamás llega a escuchar el disparo que lo mató. Más vale creerlo que averiguarlo...

Y, para endulzarnos la amarga píldora: El capellán de la prisión le dice al condenado a muerte: “Tu ejecución está programada para las 6 de la mañana, pero te conseguí 15 minutos de clemencia”. “No es mucho –responde el reo- pero en fin, que pase Clemencia”...

Nos leeremos en la siguiente Cornada. Y manda tus pertinentes comentarios (impertinentes ¡absteneos!), simplemente haz click en la verde palabra ‘comentarios’ aquí abajito y sigue sin temor las instrucciones para publicarlos, anónimos o con tu URL. ¡Ciao!
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