La Guardia Civil Española
Esto pasa por andar bebiendo Coca-Cola -Evo Morales
LA CORNADA
Por Renecio del Rincón t.
“Apunta hacia La Luna, pues aunque te equivoques,
irás a parar a las estrellas”…
-Anónimo.
Policía sin adjetivos
El H. Ayuntamiento de la ciudad de Sayula, a través de su Secretario General, anuncia que el ‘servicio’ de la Policía de Tránsito y Vialidad será municipalizado a partir del próximo 1º de mayo. Iniciativa ésta que representa una vieja y loable ambición de nuestro alcalde, doctor Samuel Rivas Peña, quien la esbozara desde su anterior trienio de gestión y que ahora verá su cristalización, si todo va bien y no se presentaran escollos de última hora. No hay que perder de vista la resistencia de muchos gobernadores estatales (los del PRI, pá variar…) a la creación de una policía nacional única, misma que ha comprobado su eficacia en muchos otros países, gobernadores que a cambio pretenden estatizar las policías municipales. Con lo que volveríamos en Sayula al punto de partida…
Eduardo Caccia, estudioso del comportamiento social e individual, escribió el 27 de marzo en Mural: “Si los mexicanos no conseguimos tener una Policía respetable, difícilmente vamos a respetar la ley”… “En todos lados hay buenos y malos policías, he visto operar un modelo de policía que funciona, uno sin adjetivos, que atiende tanto asuntos de tránsito como de violencia intrafamiliar, es capaz de someter a un asaltante como de bajar un gatito de un árbol. Es respetado y obedecido. Este policía sin adjetivos, transmite varios significados que sería interesante replicar para México”. Dice que las pick-up simbolizan policía primitiva, rural. Necesitamos policía ‘urbana, tecnificada’ (patrullas ‘interceptor’ grandes, poderosas y veloces.) Pero sobre todas las cosas, agrego yo, la sociedad mexicana reclama a gritos una policía, sea de cualquier nivel, DIGNA Y HONESTA. Con ello quiero decir un verdadero servidor público imbuido tan sólo de este espíritu: el de servir a su comunidad y no servirse de ella…
Ya he comentado antes que los conceptos que el señor Caccia expone, son fundamentales para expulsar de nuestro país la mentalidad del servicio público en general, como un modelo ‘chambista’ que para crear empleos ‘descansados’ se pone a inventar policías especializados -con adjetivos- para casi todo; de tránsito, de reglamentos, sanitarios, forestales, de caminos, y de cualquier otra índole siempre y cuando se trate de agotar el presupuesto. ¡Y lo agotan, ya lo creo!... Especialmente en países pobres, como el nuestro, es imperativo romper tan despilfarrador esquema, si es que deseamos sobrevivir los difíciles tiempos por los que atravesamos: Se trata de aprovechar el hecho de que el señor policía municipal se encuentra ya organizado, uniformado, armado y equipado con medios de transporte y comunicación y, sobre todo, que se encuentra ya en las calles de la población, sin horarios de oficinista como los actuales ‘tránsitos’, y puede y debe atender cualquier suceso o contingencia que afecte a la sociedad a la que sirve. Hemos observado en el extranjero, y en países mucho más ricos que México, que dicho esquema es funcional, congruente con la realidad y mucho menos oneroso que el nuestro. El concepto de “Protección Civil” va desde garantizar el orden en la ciudad y la seguridad personal y en sus bienes de todo ciudadano, así como su auxilio en casos de accidentes, desastres, incendios; en una palabra, cualquier situación adversa y… sí, ¡hasta bajar al minino del árbol! Enhorabuena al Ayuntamiento de Sayula por su acertada decisión. Es un paso en la dirección adecuada…
Y, para endulzarnos la amarga píldora: El folklórico émulo boliviano de “La Percalina Paredes”, Evo Morales, fiel como siempre a la línea bolivariana de ataque a las imperialistas transnacionales, se destapa esta semana anunciando y previniendo a su pueblo que si comen alimentos transgénicos, pollo (KFC, seguramente), y beben Coca-Cola, se convertirán en jotos y jotas. Dicho en otras palabras, no quiere que los bolivianos se sientan unos Ricky Martin… ¡Y yo que pensaba que los únicos homofóbicos éramos los atrasados e intolerantes conservadores reaccionarios! Cosas veredes, mío Cid…
