viernes, 26 de agosto de 2011

Tormenta Perfecta II

Estadio en Torreón, balas perdidas??

Casino Royale, Monterrey...

Dónde vas con mantón de Manila, dónde vas con vestido leré?...

LA CORNADA

Por Renecio del Rincón t.

“Hay que hacer lo que se debe, aunque se deba lo que se hace”…

-Catón, justificando el mega-endeudamiento de Coahuila.

Gaddafi hace teatral mutis

El pasado fin de semana fue de conmociones por todos lados. Después de más de seis meses de alternativas bélicas en Libia, su capital cae repentinamente en manos de rebeldes ante la súbita retirada de las unidades militares de élite y mercenarios, que supuestamente lucharían hasta la muerte por su bienamado Muamar Gaddafi, quien se vuelve ojo de hormiga hasta el momento de escribir estas líneas. Aunque en la opinión de muchos se encuentre, desde hace meses, disfrutando de la hospitalidad de su compinche Hugo Chávez y disfrutando del sol tropical venezolano. Otros cínicos apuntan: si quieren dar con él, cherchez l’argent, busquen la lana pues… Cabe recordar aquí que el carismático coleccionista de simpáticos gorritos y mantones libios se apoderó del país en ausencia del rey Idris, de pachanga por las Europas, por allá en el lejano 1969; cosa que lo convierte en el más longevo de los dictadores modernos, a la fecha. Esté usted al pendiente del inminente desenlace en el drama libio…

La Ínsula Coahuila

Conmocionó a medio país la reciente balacera, vista en TV nacional, en los accesos al estadio de fútbol en Torreón, Coahuila, feudo priísta con el sabio timón hereditario de los hermanitos Moreira. Para variar, todas las versiones oficiales fallan al pretender explicar lo inexplicable: No, que el zafarrancho fue afuera contra los municipales y a ras del suelo… que no, no hubo intención de afectar a los espectadores del fútbol… Lo que no aciertan a explicar son los múltiples agujeros de bala en el interior del estadio, con muros mucho más que altos sobre el nivel de la calle. Afortunadamente, no hubo desgracias personales que lamentar, tan sólo el susto y el pánico de varios miles de mujeres, niños y aficionados que, entre paréntesis, era el verdadero objetivo del asunto: terrorismo puro

Desde luego que las coincidencias existen, pero es pertinente el preguntarnos: ¿Cómo fue que se llegó en Coahuila a extremos tales? Si su gobierno estatal estaba reputado como brillante y progresista, al grado que su gobernador fue ungido para llevar las riendas del partidazo tricolor en la reconquista de la ‘pachocha’, digo del poder presidencial… Las calificadoras de crédito internacionales Fitch y Standard & Poor recién degradaron la calificación del estado de Coahuila, justo como le pasó a los E.U., y destacan la “falta de claridad u opacidad en el endeudamiento y su registro contable”… Además y con perdón del maestro Catón, el brillante gobernante con licencia de ese estado le hereda a su carnal, gobernador electo, una estratosférica deuda de 34 mil millones en vez de los siete mil que en sus libros aparecía… Y, ¿el affaire Chairez? ¿Y la guerra entre pandillas del crimen super-organizado en Coahuila-Durango, también priísta? ¿Complacencia o complicidad? Veremos… DE ÚLTIMA HORA: Anteayer fue un casino en Saltillo, centro del territorio PRI/Moreira, y ayer en otro territorio priísta lo inaudito: al menos 52 muertos en el ataque incendiario al ilegal (¡?) Casino Royale de la mártir Monterrey, Nuevo León. Y luego dicen que son los que saben gobernar…

Sayula, ¿también ínsula?...

El abuso que los fieles de Sayula hacen de la pólvora en las inacabables funciones y procesiones religiosas, en los templos católicos diseminados en la población, provocaron que en octubre pasado cosa de mil vecinos presentaran por escrito al Ayuntamiento su solicitud de una mejor reglamentación pública de esas estruendosas manifestaciones de devoción (¿?). A la fecha, nueve meses después y violando dicha autoridad el Art. 8º de la Constitución, ni siquiera ha dado contestación alguna al escrito, mucho menos aliviar tales molestias como es su obligación. En inevitable y esperada reacción clerical, tales funciones aumentaron de tono quizá acorde a los lineamientos demagógicos de la llamada Teología de la Liberación que induce a enfrentamientos clasistas. El clímax de tal política hizo explosión, literalmente, en la recién terminada fiesta parroquial en honor de su segunda patrona -el original es Santo Santiago-, que registró la mayor y más larga ( el novenario duró diez días, del 7 al 16…) decíamos muuuy larga, profusión de abusivas tronatas que recuerda la historia del pueblo…

Los periódicos semanarios serios de Sayula, encabezados por Tzaulan y el decano del periodismo local señor don Federico Munguía Cárdenas, dieron cuenta de la “Indignación del vecindario por los cohetes”, exponiendo en bien ponderadas razones las causas de tal indignación y el subsecuente lavatorio de manos, como Poncio Pilatos, asumido por el párroco responsable (¿?), quien carga a la masa ciega y anónima de ‘cultantes’ (sic) tal desaguisado… Asimismo, quien quiera que sea el que escribe la columna La Cuesta de Sayula, en el semanario Horizontes, dice: “Gracias a Dios, termina novenario (o más bien ‘cuetenario’…) a La Purísima”, y truena a continuación contra los “procuetistas” y el cura que se piensa “sucesor de Hidalgo” por sus desenfrenados repiques y nutrida balacera, terminando al preguntar urbi et orbi: “¿Qué no habrá una manera menos estúpida de gastar el dinero de la feligresía?”...

Por más que cansé las neuronas, yo no encontré esa manera menos tonta (para suavizar algo el término). Lo que sí encontré fue una manera más idiota, aunque no fuera dinero de la feligresía sayulense, pero sí del Cabildo y de una partida de tapatíos riquillos o al menos burgueses y, como escribía inolvidable plumífero local, ‘ha saver’: 200 motolocos invitados año por año por la ‘autoridá’ municipal, al congregarse alrededor de la Plaza de Armas, les dio tanto gusto el prospecto de volver a saborear un rico tatemado, que idearon un singular y agradecido saludo a Sayula consistente en desbocar el motor, con abierto escape, de sus 200 máquinas, todas paradas, durante algo así como una eternidad… O al menos eso nos parecieron los cinco minutos de infernal estruendo. ¿Cómo dice que me dijo, vecino? ¡Hábleme más fuerte que no ‘sioye’!...

Nota: Y el desafío continua: al momento de escribir esta líneas (23/08/11, 18:22 hrs.), reanuda el clero la andanada de potentes cohetones en la parroquia… Confirmado, ¡las autoridades no saben, ni quieren, leer… periódicos!

Y, para endulzarnos la amarga píldora: Decía un señor: “Cada día me tomo una pastilla de Viagra. Todavía no he podido hacer el amor, pero al menos ya no me veo tan mal en traje de baño”...

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