Uuuf, qué calorón!!...
LA CORNADA
Por Renecio del Rincón t.
“Él puede parecer un idiota y actuar como un idiota. Pero no se deje engañar.
Es realmente un idiota”…
-Anónimo.
La danza de las cifras
Contrariando por esta única ocasión a nuestro admirado Catón, quien juiciosamente escribiera el 02/05/09: “La búsqueda de chivos expiatorios es siempre peligrosa… Señalar culpables del virus que nos aqueja sólo serviría para nublar el buen juicio que más necesitamos en este momento”… Y es porque pensamos que es precisamente el buen juicio del más visible responsable en la presente debacle relativa a la salud (¿qué digo?, a la vida misma de millones de mexicanos, contribuyentes o no), lo que está actualmente en tela de duda, para cualquiera que ose sumergirse en el majestuoso Tsunami informativo (¿?) sobre la pandemia es, desde luego, la salud mental del señor Secretario de Salud, doctor José Ángel Córdova, de todos mis respetos como doctor. Con lo que no voy de acuerdo es con el papel de estrella central que ha asumido en los medios de ‘información’: prensa, radio y TV, principalmente. Quizás debería decir mejor: medios de propaganda… Veamos.
La reportera Margarita Vega del Reforma pergeñó el mismo día del comentario de Catón, una especie de agenda diaria del Secretario de marras en estas semanas de sus tribulaciones. Nos dice Mago que el día del citado funcionario empieza a eso de las seis de la mañana, y que “desde que despierta comienza a revisar noticias”, esperemos que de sus propias fuentes, porque si son las de los diarios mejor que nos den por muertos. A las 8, reunión de gabinete con su equipo más cercano; en el resto del día, dice doña Márgara, “la mayor parte del tiempo se le va en audiencias con el presidente Felipe Calderón en Los Pinos”…
De alguna manera se las ingenia el doctor Córdova para “dar entre una y dos conferencias de prensa por día, las cuales se prolongan por al menos una hora… Por la noche platica con conductores de noticieros de televisión a quienes les da el balance final del día (hasta en Mario netas apareció), cosa que lo ha convertido”, dice, “en el rostro que más tiempo aparece en la TV y la voz que más se escucha en la radio”… En otras palabras, la viva imagen del político moderno y al día. ¡Jesús mil veces!... Claro que ya veo a mis tres avispados lectores preguntándose: ¿Y a qué hora se sienta el señor en su escritorio a trabajar? Me decía un extinto cuñado al formularle alguna pregunta por el estilo: “Yo te voy a decir cuando: ¡NUUUNCA!”... El resultado de tan frenético estilo de vida lo estamos viendo en las disparatadas cifras que se han venido manejando sobre los casos ‘sospechosos, confirmados y muertes’ en la alegre contabilidad gubernamental y mediática. La misma reportera Vega nos presentó ese día una elaborada ‘tabla’ de peregrinas cifras por estado, que aparte de evidenciar la disparidad entre las muertes reportadas por los estados y las federales, caso patente el DF donde el gobierno federal señala 55 a esa fecha y en cambio Ebrard las maquilla a ‘tan sólo’ 28 y ni así logra escamotear los hechos, pues el Estado de México, que presenta el mayor número de casos probables con 239, contra 142 del DF tan sólo reporta 9 decesos contra los ya aceptados 28 por DF… Será que Peña Nieto tiene mejor atención sanitaria que Ebrard, hállele usted; que viene siendo el mismo caso de los EU -donde empezó el contagio- y que en un principio registraba más casos que México, donde tan sólo reportan dos defunciónes… ¿Why? Luego, el risible caso de Michoacán -también perre…- que de 13 casos probables resultó reportando la friolera de 45 casos comprobados ¡Brujos!... Quien esto escribe algo conoció de esa brujería de las cifras oficiales en mis 21 años de laborar en una paraestatal: después del necesario maquillaje al que se sometía la información de fin de mes, ni su propia madre la reconocería. ¡Lo juro! Mejor ni perder el tiempo en leer tan disparatadas ‘xaladas’ mentales. Y luego nos sale el doctor Córdova con una docta descalificación de la corbata por receptora de gérmenes, OK, me la quito, pero luego tendré que despojarme de la camisa, luego de la camiseta y, ¿luego?... Aunque propongo como solución genial el que vuelvan a estar de moda las corbatas de moñito como en tiempos de Ruiz Cortines. ¡No manches!...
Apestados
El gobierno de Estados Unidos recién negó el ingreso a su espacio aéreo a un vuelo de Air France Paris-México con escala en Nueva York, mismo que tuvo que hacer escala en otro lugar. ¿Por qué? ¿Terroristas musulmanes? ¿Mexicanos con flu? Nada de eso, damas y caballeros, simple y llanamente porque a bordo viajaba el periodista colombiano de apellidos Calvo Ospina, crítico acérrimo del Tío Sam y especialista en entrevistas obsequiosas a las FARC; una vez conocida la lista de pasajeros, el celoso tío negó el ingreso, así de fácil y eso que ya no está el tonto de Bush. El clamor entre la ‘intelectualidá’ es clamoroso, válganos el pleonasmo… Harían bien en tomar debida nota de lo anterior nuestros propios y deslenguados petirrojos: Monsiváis, Granados Chapa, Sergio Aguayo y plumíferos de su calaña como nuestro autóctono e inimitable Sánchez Sosa, tan cosmopolitas todos ellos… ¡Aguas!
Y, para endulzarnos la amarga píldora: Fábula hindú: Un sabio de un pueblo al salir de su ciudad se topó con la muerte que llevaba a cuestas su guadaña. Le preguntó a quién visitaría esa noche y la muerte le respondió: “Vengo a matar a dos mil personas de tu pueblo, primero enfermarán y luego me los llevaré”. El sabio volvió después de varios días de su viaje. Al regresar a su pueblo más de cinco mil habían muerto. Se topó con la muerte que ahora iba de salida y le dijo: " Me engañaste, dijiste que te llevarías dos mil y mira todos los que han muerto", -ella le respondió: "Yo sólo maté a dos mil, los demás se murieron de miedo"…
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LA CORNADA
Por Renecio del Rincón t.
“Él puede parecer un idiota y actuar como un idiota. Pero no se deje engañar.
Es realmente un idiota”…
-Anónimo.
La danza de las cifras
Contrariando por esta única ocasión a nuestro admirado Catón, quien juiciosamente escribiera el 02/05/09: “La búsqueda de chivos expiatorios es siempre peligrosa… Señalar culpables del virus que nos aqueja sólo serviría para nublar el buen juicio que más necesitamos en este momento”… Y es porque pensamos que es precisamente el buen juicio del más visible responsable en la presente debacle relativa a la salud (¿qué digo?, a la vida misma de millones de mexicanos, contribuyentes o no), lo que está actualmente en tela de duda, para cualquiera que ose sumergirse en el majestuoso Tsunami informativo (¿?) sobre la pandemia es, desde luego, la salud mental del señor Secretario de Salud, doctor José Ángel Córdova, de todos mis respetos como doctor. Con lo que no voy de acuerdo es con el papel de estrella central que ha asumido en los medios de ‘información’: prensa, radio y TV, principalmente. Quizás debería decir mejor: medios de propaganda… Veamos.
La reportera Margarita Vega del Reforma pergeñó el mismo día del comentario de Catón, una especie de agenda diaria del Secretario de marras en estas semanas de sus tribulaciones. Nos dice Mago que el día del citado funcionario empieza a eso de las seis de la mañana, y que “desde que despierta comienza a revisar noticias”, esperemos que de sus propias fuentes, porque si son las de los diarios mejor que nos den por muertos. A las 8, reunión de gabinete con su equipo más cercano; en el resto del día, dice doña Márgara, “la mayor parte del tiempo se le va en audiencias con el presidente Felipe Calderón en Los Pinos”…
De alguna manera se las ingenia el doctor Córdova para “dar entre una y dos conferencias de prensa por día, las cuales se prolongan por al menos una hora… Por la noche platica con conductores de noticieros de televisión a quienes les da el balance final del día (hasta en Mario netas apareció), cosa que lo ha convertido”, dice, “en el rostro que más tiempo aparece en la TV y la voz que más se escucha en la radio”… En otras palabras, la viva imagen del político moderno y al día. ¡Jesús mil veces!... Claro que ya veo a mis tres avispados lectores preguntándose: ¿Y a qué hora se sienta el señor en su escritorio a trabajar? Me decía un extinto cuñado al formularle alguna pregunta por el estilo: “Yo te voy a decir cuando: ¡NUUUNCA!”... El resultado de tan frenético estilo de vida lo estamos viendo en las disparatadas cifras que se han venido manejando sobre los casos ‘sospechosos, confirmados y muertes’ en la alegre contabilidad gubernamental y mediática. La misma reportera Vega nos presentó ese día una elaborada ‘tabla’ de peregrinas cifras por estado, que aparte de evidenciar la disparidad entre las muertes reportadas por los estados y las federales, caso patente el DF donde el gobierno federal señala 55 a esa fecha y en cambio Ebrard las maquilla a ‘tan sólo’ 28 y ni así logra escamotear los hechos, pues el Estado de México, que presenta el mayor número de casos probables con 239, contra 142 del DF tan sólo reporta 9 decesos contra los ya aceptados 28 por DF… Será que Peña Nieto tiene mejor atención sanitaria que Ebrard, hállele usted; que viene siendo el mismo caso de los EU -donde empezó el contagio- y que en un principio registraba más casos que México, donde tan sólo reportan dos defunciónes… ¿Why? Luego, el risible caso de Michoacán -también perre…- que de 13 casos probables resultó reportando la friolera de 45 casos comprobados ¡Brujos!... Quien esto escribe algo conoció de esa brujería de las cifras oficiales en mis 21 años de laborar en una paraestatal: después del necesario maquillaje al que se sometía la información de fin de mes, ni su propia madre la reconocería. ¡Lo juro! Mejor ni perder el tiempo en leer tan disparatadas ‘xaladas’ mentales. Y luego nos sale el doctor Córdova con una docta descalificación de la corbata por receptora de gérmenes, OK, me la quito, pero luego tendré que despojarme de la camisa, luego de la camiseta y, ¿luego?... Aunque propongo como solución genial el que vuelvan a estar de moda las corbatas de moñito como en tiempos de Ruiz Cortines. ¡No manches!...
Apestados
El gobierno de Estados Unidos recién negó el ingreso a su espacio aéreo a un vuelo de Air France Paris-México con escala en Nueva York, mismo que tuvo que hacer escala en otro lugar. ¿Por qué? ¿Terroristas musulmanes? ¿Mexicanos con flu? Nada de eso, damas y caballeros, simple y llanamente porque a bordo viajaba el periodista colombiano de apellidos Calvo Ospina, crítico acérrimo del Tío Sam y especialista en entrevistas obsequiosas a las FARC; una vez conocida la lista de pasajeros, el celoso tío negó el ingreso, así de fácil y eso que ya no está el tonto de Bush. El clamor entre la ‘intelectualidá’ es clamoroso, válganos el pleonasmo… Harían bien en tomar debida nota de lo anterior nuestros propios y deslenguados petirrojos: Monsiváis, Granados Chapa, Sergio Aguayo y plumíferos de su calaña como nuestro autóctono e inimitable Sánchez Sosa, tan cosmopolitas todos ellos… ¡Aguas!
Y, para endulzarnos la amarga píldora: Fábula hindú: Un sabio de un pueblo al salir de su ciudad se topó con la muerte que llevaba a cuestas su guadaña. Le preguntó a quién visitaría esa noche y la muerte le respondió: “Vengo a matar a dos mil personas de tu pueblo, primero enfermarán y luego me los llevaré”. El sabio volvió después de varios días de su viaje. Al regresar a su pueblo más de cinco mil habían muerto. Se topó con la muerte que ahora iba de salida y le dijo: " Me engañaste, dijiste que te llevarías dos mil y mira todos los que han muerto", -ella le respondió: "Yo sólo maté a dos mil, los demás se murieron de miedo"…
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